
Pero lo que más se resaltará es sobre la situación crítica que viven los pueblos originarios y varias comunidades campesinas amenazadas por proyectos mineros e hidroeléctricos.
Asimismo, en esta Cumbre de las Pueblos se apoyará las reivindicaciones de Bolivia por tener una salida al mar, el derecho de Puerto Rico a la independencia y se criticará el intervencionismo norteamericano en la región.
Por otro lado, se sumaran en los días posteriores a la Cumbre de los Pueblos 300 delegados indígenas de todo el continente que no se sienten “representados” en la Cumbre de las Américas formando los días 10 y 11 la “V Cumbre Continental de Pueblos y Nacionalidades Indígenas de Abya Yala”
Al respecto, el portavoz de la Coordinadora Nacional de Pueblos Indígenas de Panamá (COONAPIP), Williams Barrigón considera que ambas reuniones son importantes pero existen realidades distintas.
“Consideramos positivo la reunión de los jefes de Estado, pero existen posicionamientos y realidades distintas que los pueblos indígenas vamos a presentar por separado” afirmó.
Asimismo el asesor legal de la COONAPIP, Héctor Huertas criticó que muchos (jefes de Estado) vienen (a la Cumbre de las Américas) solo a sacarse fotos y a tomar cafés.
“Es una oportunidad única para traer al debate político la situación de empobrecimiento de los más de 40 millones de indígenas que hay en América”, añadió Huertas.
El dato:
Los asistentes a esta reunión “buscarán alianzas” entre ellos e instarán a los jefes de Estado del continente a “implementar” la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, adoptada en 2007.