Este 21 de enero por quinta vez, los pueblos indígenas en aislamiento voluntario se aproximaron a las comunidades nativas, dejándose observar por la comunidad Shipetiari. Esta vez el grupo de no contactados se presentó armado y con arcos ya que según el testimonio de la hermana indígena se encontraban cazando.
La hermana indígena que pudo observarlos, Rufina Rivera, pertenece a la comunidad nativa machiguenga Shipetiari ubicada en la provincia del Manu, en Madre de Dios. Ella aseguró que tuvo que buscar refugio en un puesto de salud de su comunidad para evitar incomodar a los hermanos Mashco Piro.
Rápidamente esta información llego a un agente de protección del Ministerio de Cultura que se desplazó a Shipetiari para recoger información e instruir a los comuneros y al personal de salud de la localidad evitar exponerse a situaciones de riesgo con los Mashco Piro.
Por ello, la Comisión de Emergencia para Pueblos Indígenas en Aislamiento o Contacto Inicial para la Cuenca del Alto Madre de Dios, creada en setiembre del 2014, envió otra comitiva a Shipetiari a fin de evaluar la situación y realizar las acciones de respuesta correspondientes.
Asimismo, la Dirección de Pueblos Indígenas en Situación de Aislamiento y Contacto Inicial (Piaci) del Ministerio de Cultura, envió un grupo de especialistas hacia Puerto Maldonado para garantizar la protección de pobladores.
La Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana, a través de su programa de Pueblos Indígenas en Aislamiento Voluntario (PIAV) menciona que la razón de estos constantes encuentros de los pueblos indígenas en aislamiento voluntario es porque en las zonas donde habitan los indígenas autónomos poco a poco van siendo invadidas por foráneos buscando fuentes de ingresos económicos, produciendo grandes deforestaciones y degradación del bosque amazónico.
Por ello, AIDESEP exige que se “Proteja y defienda a los pueblos indígenas en aislamiento voluntario y contacto inicial de la Amazonía peruana”.