Pueblos indígenas hacen un balance de los avances y desafíos para una participación indígena efectiva en el marco de la gobernanza del Acuerdo de Escazú.
Delegados de la Coordinadora de las Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (COICA), la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (AIDESEP) y la Alianza Mesoamericana de Pueblos y Bosques (AMPB), articulados en la Alianza Latinoamericana de Defensores y Defensoras del Territorio Indígena (ALADTI) hicieron escuchar su voz en los espacios de la tercera Conferencia de las Partes (COP) del Acuerdo de Escazú, evento convocado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
Como respuesta a su participación, los pueblos indígenas realizaron un balance de los resultados de la COP3, que se comparten a continuación con el propósito de dar a conocer sus puntos de vista. En sesiones previas a la COP (19 y 20 de abril) las delegaciones y plataformas indígenas lograron convocar a diferentes defensores, defensoras y organizaciones indígenas en la Pre COP Escazú (de sociedad civil) en Chile, en la cual se sumaron a la Declaratoria de la Alianza Latinoamericana de defensores y Defensoras del Territorio Indígena documento que además fue recogido en las “Conclusiones de la primera Pre COP de la Sociedad Civil del Acuerdo de Escazú”, con más de 700 adhesiones. En la declaratoria se presentaron 5 puntos para la participación indígena efectiva en el marco de la gobernanza de Escazú:
- Continuar con el Foro sobre Defensoras y Defensores anual y permanente de los Derechos Humanos en Asuntos Ambientales de América Latina y el Caribe, espacio necesario para la rendición de cuentas y la articulación a nivel regional y transfronteriza.
- Mantener el Grupo de Trabajo Ad Hoc de composición abierta de manera obligatoria a defensores/as, representantes de los pueblos indígenas y afrodescendientes como mecanismo de articulación, seguimiento e implementación efectiva del Plan de acción sobre defensoras y defensores de derechos humanos en asuntos ambientales en América Latina y el Caribe.
- Contar con un Caucus Indígena como espacio propio de (y para) defensoras/es indígenas territoriales integrado en el marco de la COP, que cuente con apoyo técnico y financiero para su funcionamiento.
- Contar con una Relatoría sobre Pueblos Indígenas y comunidades locales territoriales, para la elaboración de informes que recoja la realidad de las necesidades y amenazas que enfrentamos de los defensores/as indígenas y que recomiende acciones efectivas para su protección.
- Establecer un protocolo de participación y comunicación efectiva con las organizaciones y pueblos indígenas, no solamente espacios virtuales de participación en el marco de la gobernanza e Implementación del Acuerdo de Escazú.
En la apertura de la COP 3, el 22 de abril, día de la Madre Tierra, diferentes delegaciones reconocieron la necesidad de implementar los 4 pilares de Escazú, siendo urgente la protección a defensores y defensoras ambientales.
“En América Latina y el Caribe sabemos que tenemos el triste récord de ser la región en donde más asesinan a defensores ambientales”, expresó Gabriel Boric, presidente de Chile, quien estuvo presente en la inauguración de este importante evento. Asimismo, diversas autoridades y representantes de Estados, sucedieron las siguientes intervenciones resaltando a los pueblos indígenas como defensores.
Sin embargo, estas declaraciones no guardan coherencia con la decisión de los Estados de no aceptar que se incluya la mención “pueblos indígenas” dentro del grupo ad hoc de defensores y defensoras, que el foro de defensores y defensoras sea anual y que exista apoyo técnico y financiero para implementar un espacio propio indígena (Caucus indígena) dentro del proyecto de decisión final de aprobación del Plan de personas defensoras en derechos humanos ambientales. “Con ello los defensores indígenas aún siguen ausentes en el lenguaje y órganos de Escazú, tampoco se han dado los esfuerzos suficientes para
fortalecer la participación efectiva de nuestros pueblos indígenas. No hay democracia ambiental sin pueblos indígenas”, expresó Jammer Manihuari de la COICA.
Si bien se logró la inclusión de la participación de pueblos indígenas en los planes nacionales de implementación de los Países parte, no hubo la misma suerte en el Plan de personas defensoras. Teresita Antazú, miembro del Consejo Directivo de AIDESEP, explicó que: “este punto se logró luego de varias intervenciones de las defensoras indígenas que hemos venido trayendo la voz de miles defensores y defensoras, hemos venido diferentes delegaciones de mujeres trayendo nuestras propuestas”.
En relación a la decisión final de la aprobación del Plan de personas defensoras, Dina Júc, representante de la AMPB, sostuvo: “Nos sentimos decepcionados con los resultados de las discusiones, pues no se ha incluido mecanismos concretos de participación de las y los defensores indígenas. De este modo, si bien hemos apoyado la aprobación de este plan y pedimos que se apruebe, no se incluyó en la decisión final un espacio para nosotros como los reales actores de la protección de los bosques y el territorio”.
“Como pueblos indígenas no podemos restringirnos a participar a través de espacios virtuales. En ese sentido, nos encontramos inconformes con los resultados finales. Señalamos nuestra respetuosa discrepancia a la respuesta que la Secretaría Ejecutiva de la CEPAL brindó a nuestras propuestas. Estamos en desacuerdo con lo aprobado por los Estados de solo mencionar “significativa participación del público” dentro del grupo de trabajo ad hoc sobre defensoras y defensores sin mencionar específicamente a los pueblos indígenas”, concluyó Jammer Manihuari de la COICA.
Por eso, desde la ALADTI, “continuaremos trabajando hacia el próximo Foro y la Conferencia de las Partes (COP) y exhortamos a la Secretaría del Acuerdo de Escazú a cargo de la CEPAL, la Mesa Directiva, los Estados parte, la Conferencia de las Partes del Acuerdo, el Grupo de Trabajo Ad Hoc de composición abierta sobre defensoras y defensores de los derechos humanos en asuntos ambientales, y el Comité de
Cumplimiento, a tomar nuestras propuestas. Los pueblos indígenas somos los actores principales de primera línea defensores y con las defensoras del territorio, por ello trabajaremos conjuntamente, porque la crisis climática global, la deforestación, sus impactos en el territorio, y la violencia estructural no cesarán fácilmente”, refirió Miguel Guimaraes, vicepresidente de AIDESEP.