Empresa Isolux Corsan atenta contra la amazonía talando de forma indiscriminada más de 50 metros de bosques en territorio de la comunidad Saramiriza del pueblo Campuapiawi- Shawi, para la construcción de una torre de alta tensión. Este grave hecho es producto del desarrollo de un proyecto eléctrico, que sorprende a las comunidades indígenas, pues no se ha realizado un proceso de consulta previa por parte de la empresa privada ni por el propio Estado.
Este proyecto eléctrico pertenece a los trabajos desarrollados para la construcción de la línea de transmisión eléctrica de 220 kv Moyobamba – Iquitos, el cual tiene por conveniente tener que talar un área de cincuenta metros a lo largo de todo el cableado dentro del territorio de la comunidad nativa de Saramiriza. Dejando así la pérdida de diferentes especies de árboles medicinales o maderables como Tornilla, Papelillo, Huayaurom y Copaiba. Además de la destrucción de los recursos de la zona.
Incluso esta empresa para la extracción de árboles en la zona, viene señalizando todos los árboles que van a hacer talados utilizando materiales tóxicos y contaminantes, realizando así de manera consciente y planificada el proceso de desbosque. Según la denuncia presentada, esta empresa no estaría contando con la respectiva autorización de desboque, ni con permiso de las comunidades para ejecutar algún tipo de actividad.
Por ello, los representantes de la comunidad de Saramiza han denunciado penalmente a la empresa ISOLUX por el delito de usurpación agravada y daño agravado. Delitos que se amparan en los artículos 202 y 206 del código civil además del delito por tala indiscriminada respaldado por el artículo 310 del código penal.
Las comunidades indígenas del distrito de Balsa Puerto manifiestan que su forma de vida está en peligro pues gracias a sus conocimientos tradicionales se han desarrollado en armonía con sus bosques en sus territorios, preservándolos por tradición por ser su fuente de subsistencia.
