En el marco de la primera Conferencia Mundial de los Pueblos Indígenas que se celebrará del 22 al 23 de setiembre. Representantes de los 370 millones de indígenas del planeta exigen desempeñar un papel clave en la agenda de desarrollo post-2015 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que se terminará de definir el próximo año.
Ya que los pueblos indígenas continúan luchando por su derecho a la autodeterminación, que todavía no es una realidad a pesar de que los ampara en ese sentido la Declaración de la ONU sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, exigen con convicción su inclusión en la agenda de desarrollo.
“El mundo todavía se puede beneficiar de nuestro conocimiento e incluirnos en la travesía de los próximos 15 años. Y queremos que esta sea una asociación equitativa, no queremos ser los beneficiarios”, declaró Galina Angarova, la representante en Nueva York de la Fundación Tebtebba, Centro Internacional de los Pueblos Indígenas para la Investigación sobre Políticas y Educación tras su participación el 29 de agosto en la sesión de clausura de la conferencia de las organizaciones no gubernamentales (ONG) que auspició el Departamento de Información Pública (DIP) de la ONU.
Además, la representante Angarova señaló la importancia de la voz de los pueblos indígenas, ya que sus territorios abarcan el 24 por ciento del planeta y albergan 80 por ciento de la biodiversidad del mundo y que sin embargo, muchas empresas se fijan en esos territorios (indígenas) pensando en su lucro futuro. “Por ello nosotros los indígenas creemos que el consentimiento previo, libre e informado es la clave. Porque sin él, las empresas tienen la libertad de apoderarse de esas tierras y explotarlas”.
Inclusive los pueblos indígenas vivimos de forma sostenible desde hace siglos y transmitimos nuestros conocimientos de generación en generación, alimentando a su población sin perjudicar a la naturaleza. Esa es una de las razones de por qué la protección de la cultura indígena es fundamental, añadió.
Tras estas manifestaciones se redactó una de declaración oficial que se incorporará a la discusión sobre la agenda post-2015 en la primera Conferencia Mundial de los Pueblos Indígenas. Aunque esta declaración no es jurídicamente vinculante, es un documento de referencia en la que se señala las posiciones presentadas oficialmente por los representantes indígenas.