Los Apus de las comunidades indígenas de la Cuenca de las Piedras y de Puerto Maldonado, denunciaron que la infraestructura de las escuelas ubicadas en las comunidades nativas se encuentran en pésimas condiciones.
A pocos días de iniciar las labores estudiantiles la situación en la que los niños y niñas indígenas reciben clases es deprimente y desfavorable, debido a que las autoridades no se preocupan por el mobiliario y las condiciones de las escuelas.
Amancio Zamudio, jefe comunal de Santa Teresita, dijo que el local que alberga a los niños de inicial está en situación regular, a diferencia de la aulas de los alumnos de primaria que se encuentran en estado deplorable. Señaló que las escuelas donde se brindan clases fueron hechas por los mismos comuneros usando materiales de la zona, y que hasta el momento el Estado no se ha hecho presente. Igual situación se vive en las demás comunidades de la zona.
Es lamentable que tanto Santa Teresita como Sonene, no cuenten con un colegio para el nivel secundario, lo que obliga a que adolescentes de 12 y/o 13 años tengan que migrar a Puerto Maldonado, vivir solos o en casa de algún conocido o familiar.
Por lo que son muy pocos los que llegan a concluir sus estudios, debido a que los bajos recursos económicos con los que cuentas unido a que muchos de ellos no se
acostumbran a vivir en la ciudad entre otros factores los obligan a desertar.
Muchos de ellos sin concluir sus estudios secundarios regresan a sus comunidades para dedicarse al trabajo de campo cortando así sus posibilidades de estudios superiores y formarse un futuro profesional.